Las tarjetas bancarias son un bien muy preciado por los estafadores.
Antes se copiaba la banda magnética usando un dispositivo colocado en la ranura de entrada del cajero o mediante un duplicador cuando entregaba la tarjeta para realizar el pago. Hoy en día con el práctico desusos de la banda a favor del chip y el dispositivo contact-less (RFID) los estafadores han cambiado la forma en que se obtienen los datos de las tarjetas bancarias es más sencillo de lo que usted se imagina lo hacen mediante:
- La venta de un producto o servicio por Internet a buen precio, lo de menos es que le envien el producto o le den accesos a videos u otros servicios, lo que realmente quieren son sus datos que venden a un tercero que le intentará vaciar su cuenta bancaria mediante compras.
- Una llamada telefónica (vishing), email (phising) o SMS (smishing) que le indican que urgentemente tiene que pagar una deuda de su banco, o un envío que le va a llegar, o desbloquear una cuenta, ... para solicitarle todos los datos de su tarjeta.
Así que a la recomendación de no soltar nunca la tarjeta de sus manos, para evitar que se la clonen, añada la de no dar los datos de su tarjeta a menos que sea una web de confianza. Y las recomendaciones de siempre si no puede evitar el pago con tarjeta use tarjetas prepago (limitará la perdida a la cantidad cargada) o use un intermediario de pago como paypal.
Si con todo, es estafado primero anule la tarjeta y pida otra, y a continuación denuncie el hecho ante la policía (Usted tiene la obligación de denunciar los delitos y la policía de cursar la denuncia, en España la Ley de Enjuiciamiento Criminal ) para ello necesitará los datos de la transacción que le facilitará su Banco. Una vez denunciado reclame con ella al proveedor de su tarjeta VISA, MASTERCARD, etc. a través de su banco pues no dejan de ser operaciones no autorizadas (En España le protege la Ley de Servicios de Pago que traslada la normativa Europea).
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